- FECHA
- 11/06/1971
- REMITENTE
- Francisco Ayala
- DESTINATARIOS/AS
- Max Aub
- DESTINO
- S.l.
- ORIGEN
- Madrid
- FICHA DESCRIPTIVA
[Carta mecanografiada con firma autógrafa]
- DEPÓSITO DEL ORIGINAL
- Fundación Max Aub
Carta de Francisco Ayala a Max Aub (11/06/1971)
Madrid, 11 de junio de 1971
Mi querido Max:
Heme aquí de nuevo, en el seno amante de la Madre Patria, bregando con las cuestiones editoriales en las que, por muchos agentes literarios que utilices y por buenos que sean, tienes tú que hacer, quieras que no, de agente de ti mismo. Las cosas en marcha son: un nuevo tomo de obras completas, a cuenta de Aguilar, aunque esta vez aquí, y bajo el titulo de Teoria y critica (unas 1.500 páginas que tendré ante mi mesa este verano); un (relativamente) nuevo libro narrativo que saca Seix Barral, y otro tomo, por el mismo editor, con mis apolilladas cositas de vanguardia.
Habrás visto o sabido cómo las ediciones de Andorra han resultado, por peleas de los socios, un desastre. El bueno de Andujar, con la mejor voluntad, me metió en eso, y el resultado ha sido catastrófico. ¡Qué se le va a hacer! ¡Vaya por las buenas voluntades!
Aquí, el ambiente, con sus tira y afloja, continúa abriéndose poco a poco. Me encuentro, por ejemplo, con que el tomo de Obras narrativas completas, que no dejaban vender ni introducir en España, ha sido autorizado en cantidad pequeña (pero tú sabes que el cuentagotas requiere un pulso delicado para que no se vaya la mano). Creo que es el comienzo cauteloso para dejar que el libro circule. Y me parece a mí que, incluso, pasados un par de años o tres, va a poderse publicar en España La cabeza del cordero, plato por lo visto demasiado indigesto para los estómagos oficiales, y que fue explícitamente la causa de la prohibición de las Obras. Entre tanto, y a propósito de este libro, quisiera ver yo si se hace una edición decente en América, pues es lo cierto que sigue leyéndose, estudiándose y comentándose, sin que sea fácil de adquirir en ninguna parte. Ahora mismo lo ha traducido al inglés una profesora norteamericana con vistas a publicarlo allí, y lo ha precedido de un estudio realmente espléndido; pero, en su idioma original, en español, el libro resulta inaccesible. Se me ocurre que, pues al parecer van a levantar de nuevo el Fondo de Cultura Económica, sería esa editorial donde varios libros mios se publicaron, la más idónea para lanzar una edición digna, que podría llevar, traducido, el estudio de esa señora. ¿Por qué no se lo sugieres a Jaime García Terrés? Yo le escribiría directamente, pero no sé su dirección; y cómo fuiste tú, si te acuerdas, quien nos puso en contacto (un contacto muy cordial, aunque hace tiempo no lo hayamos renovado), me parece que, si no tienes inconveniente, sería propio que tú le propusieras el asunto en mi nombre, ¿Tienes inconveniente? Ya me dirás lo que haya.
Pienso estarme aquí todo este mes y parte del de julio, pues me gustaría poder escribir algo, y aunque no lo parezca, Madrid es sitio ideal para eso durante el verano. Además, la corrección de esas mil y quinientas páginas de pruebas tomará su tiempo. Más vale hacerlo in situ que no depender del correo, que en Estados Unidos se ha hecho muy poco reliable. Acaso cuando termine con eso vaya a pasar unos dias en México, ya que en el invierno no pude cumplir ese deseo, ya antiguo, de darme una vuelta por ahí.
¿Y tú, qué piensas hacer en los próximos meses? ¿Y qué has hecho en los pasados? En este pais que, después de todo, no deja de ser el nuestro, tu nombre y el mio aparecen ahora constantemente en los periódicos, a veces también nuestras bellas efigies; y aunque dicen que nunca es tarde, lo cierto es que esta fama cuasi póstuma al menos a mí me deja frio… como es natural.
Nada más te escribo hoy. Pero si me contestas pronto y extensamente volveré a hacerlo en iguales términos enseguida.
Mis saludos afectuosos a Peua, y un gran abrazo de
Ayala.-